Entre los servicios que podrían registrar aumentos se encuentran el SOAT, las matrículas y pensiones escolares, las tarifas en servicios médicos privados, algunos gastos de transporte y ciertos cobros notariales que operan bajo parámetros definidos por el salario mínimo legal vigente.
De acuerdo con analistas del sector económico, el reajuste anual del salario mínimo no solo busca mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores, sino que también repercute en la estructura de precios de servicios que utilizan esta medida como base para calcular tarifas y aportes.
Se prevé que los hogares deban reorganizar sus presupuestos para enfrentar estos incrementos, especialmente en rubros donde el ajuste es automático o semiautomático. Las empresas de sectores regulados, por su parte, ya adelantan proyecciones internas para adaptar sus modelos de cobro al nuevo marco salarial.
Redaccion: Lumacastereo
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