Las sanciones fueron impuestas luego de que se estableciera que Palomino habría utilizado su posición para influir indebidamente en un proceso disciplinario, conducta considerada una falta gravísima.
El escenario jurídico del exdirector se complejaba aún más debido a la condena penal que pesa en su contra por el delito de tráfico de influencias, relacionado con intervenciones irregulares para favorecer a un tercero investigado por delitos graves.
Con la decisión del Consejo de Estado, quedan cerradas las vías administrativas para anular la sanción disciplinaria. Aunque puede intentar nuevas acciones judiciales, la inhabilidad y la destitución continúan vigentes, limitando cualquier posibilidad de vinculación a cargos públicos.
Redaccion : Noticiero del Llano
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