El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, calificó como “ridículo” e “injusto” que la concesionaria Coviandina señalara a 12 viviendas rurales como presuntas responsables del deslizamiento registrado en el kilómetro 18+600 de la vía Bogotá–Villavicencio, en la vereda Caraza.
De acuerdo con Rey, en la zona habitan menos de 40 campesinos, la mayoría adultos mayores y personas en condición de discapacidad, cuya actividad económica principal es el cultivo de aromáticas y hortalizas.
El mandatario cuestionó que se pretenda desviar la atención del verdadero problema: la filtración de agua desde la vía hacia la montaña. Recordó que la anterior concesionaria ya había identificado la situación y construido canales y pozos de abatimiento para drenar el terreno. Sin embargo, esas obras no recibieron el mantenimiento adecuado.
“Los canales se fisuraron, los pozos se saturaron y dejaron de conectarse entre sí. ¡Culpar a los campesinos es absurdo e injusto! Solo falta que pretendan que ellos mismos estabilicen la montaña”, manifestó.
Rey hizo un llamado al Gobierno Nacional para que se garantice una solución definitiva a esta problemática que afecta gravemente la movilidad entre Bogotá y los Llanos Orientales. Destacó la presencia en la zona de la ministra de Transporte y la instalación de un Puesto de Mando Unificado (PMU) nacional, desde donde se analizarán alternativas de financiación y obras de mitigación.
Fuente: ExitosStereo