El fenómeno ha generado avisos en distintas islas caribeñas, donde se da seguimiento cercano a su evolución. Autoridades en los países afectados han iniciado ya activación de protocolos de emergencia, emitido alertas a la población y desplegado equipos de monitoreo en la costa.
Empresas de transporte marítimo y aéreo también han ajustado sus operaciones, suspendiendo rutas en las zonas de riesgo y reforzando medidas preventivas para garantizar la seguridad de usuarios y personal.
Se espera que en las próximas horas la tormenta aumente su intensidad, por lo que los meteorólogos vigilan variables clave como la presión atmosférica, la temperatura del mar y los vientos máximos sostenidos.
Gobiernos regionales han emitido recomendaciones para que comunidades costeras revisen planes de evacuación, refuercen viviendas y almacenen suministros básicos.
La evolución de este sistema será seguida de cerca durante los próximos días, mientras se anticipa su llegada al territorio continental de Estados Unidos con potencial de impacto significativo.
Fuente: ExitosaStereo