Con la llegada de Halloween, miles de niños en todo el país se preparan para disfrutar de la tradicional jornada de disfraces y dulces. Sin embargo, las autoridades sanitarias recuerdan la importancia de revisar cuidadosamente los productos que los menores reciben durante las actividades de este día, para prevenir posibles casos de intoxicación o afectaciones en la salud.
Los especialistas insisten en que algunos dulces pueden estar en mal estado, haber sido manipulados de forma inadecuada o carecer de registro sanitario, lo que representa un riesgo especialmente alto en los niños más pequeños.
Recomendaciones de prevención
Verifique los empaques:
- descarte cualquier dulce sin envoltorio o con el empaque roto, abierto o alterado.
- Revise etiquetas y fechas: los productos deben tener visible la fecha de vencimiento, los ingredientes y el nombre del fabricante.
- Evite dulces de dudosa procedencia: prefiera productos comprados en establecimientos reconocidos y evite los ofrecidos por vendedores informales.
- Observe olor, color y textura: sí nota cambios en el aspecto o aroma, lo más prudente es no consumirlos.
Controle el consumo: limite la cantidad de dulces para evitar molestias digestivas y exceso de azúcar.
Cuidado integral
Antes de salir a pedir dulces, se recomienda ofrecer a los niños una comida completa para reducir la ansiedad por consumir golosinas. Una vez en casa, los padres deben revisar cuidadosamente cada dulce y desechar los que no cumplan con las condiciones mínimas de seguridad.
Asimismo, se sugiere promover una adecuada higiene oral después del consumo, ya que el exceso de azúcar puede provocar caries y otros problemas dentales.
En caso de emergencia
Si un menor presenta síntomas como náuseas, dolor abdominal, vómito o mareos después de ingerir dulces, debe acudir inmediatamente al servicio médico más cercano y conservar el producto sospechoso para facilitar el diagnóstico.
Redaccion:ExitosaStereo
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