La funcionaria subrayó que estas áreas no implican procesos de expropiación ni están relacionadas con la redistribución de tierras, como han señalado algunos sectores políticos en medio del ambiente preelectoral.
“Se ha dicho que la intención del Ministerio de Agricultura es expropiar, y de manera muy clara lo hemos dicho: nada más falso. Estas áreas no mutan, condicionan o transforman la propiedad”, aseguró Carvajalino.
En ese sentido, la ministra explicó que la redistribución de tierras en Colombia se realiza a través del Fondo Nacional de Tierras y de un programa paralelo de adjudicación, y no mediante las APPA.
Actualmente, el Gobierno ha declarado dos áreas de especial protección: una en el sur de La Guajira, enfocada en recuperar sistemas agroalimentarios en una zona con altos indicadores de hambre, y otra en Sopó (Cundinamarca), con 1.900 hectáreas de suelos fértiles en la Sabana de Bogotá.
La cartera agrícola trabaja en nuevos procesos de identificación de suelos en Casanare, Cauca, Putumayo, Tolima, Antioquia y Cundinamarca, para avanzar en la ampliación de este modelo.
Carvajalino también aclaró que las APPA no interfieren con actividades mineras, pues los suelos que ya han sido intervenidos para extracción de carbón, grava o arcilla dejan de ser considerados agropecuarios.
Con estas declaraciones, el Gobierno busca despejar dudas y blindar una política que considera estratégica para la seguridad alimentaria del país.
Fuente: ExitosaStereo